Por una mejor calidad de vida

Mañana viernes día 29 de mayo, a las 12:30 horas, la F.V.A.F.A (Federación Valenciana de Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzheimer) presentará en el Hotel Tres Anclas de la Playa de Gandia el proyecto "Espais de Vida", que tiene como finalidad mejorar la calidad de vida de los cuidadores y los enfermos de Alzheimer. Dicho proyecto está financiado por Obra Social Caixa Sabadell y consiste en un encuentro donde los familiares disfrutarán de un periodo de descanso en una convivencia organizada en la que personas de diferentes orígenes comparten durante unos días experiencias de forma planificada bajo la supervisión de profesionales adecuadamente preparados, mientras el enfermo se encuentra bien asistido. De cada una de las 29 asociaciones acuden dos familiares y dos enfermos. Todo ello se desarrollará los días 29, 30 y 31 de mayo en el Hotel Tres Anclas.

Premis a les fotos del Voluntariat

Este divendres 29 de maig, a la Sala d'Usos Múltiples del Casal Jove de Gandia (en l'Avinguda Beniopa) s'inaugurarà l'exposició i es lliuraran els premis als guardonats de la 4ª Edició del Concurs Fotogràfic del Voluntariat Ecològic de Gandia. Els guanyadors del Concurs de Fotografia són: Silvia Juan González (Primer premi), Borja Gil Camarena (Segon premi) i menció especial per a Juan Manuel Patón Navarro (tema Voluntariat Ecològic Gandia). En temàtica lliure han guanyat Daniel Garcia Moragues, Juan Manuel Patón Navarro i Miryam Verger Díaz.

Raimundo Amador en Gandia

Raimundo Amador, con toda su banda y su inseparable Gerundina, presentará su gira "Grandes éxitos" el próximo sábado día 30 de Mayo en la Sala Varadero de la Playa de Gandia. Dentro del marco de la gran gira que le está llevando por los mejores teatros y salas de conciertos de España, Raimundo Amador recala en el Varadero para presentar en directo las mejores canciones de su dilatada carrera. Raimundo, el gran creador de la fusión del flamenco con el rock y el blues, ha marcado un estilo propio e inconfundible, que con el paso del tiempo se ha convertido en sello de identidad: junto a Lin Cortés a la guitarra y voz; Carmen Amador a la voz; Pepe Bao al bajo; Alvaro Gandul a los teclados; Anye Bao a la bateria y Mundi Amador los conciertos de Raimundo Amador se han convertido en un referente ineludible para cualquiera que guste de la buena música y del espectáculo en el escenario.
Sería interminable la relación de artistas que han querido contar con la guitarra y la voz de Raimundo en sus discos: B.B. King, Ketama, Björk, Los Rodríguez; Radio Futura, Camarón de la Isla, Rosario, Luz Casal, Antonio Flores, Nacho Campillo, Martirio, etc.

Angelicos míos

Dan Brown es uno de los escritores que más libros venden en todo el mundo. Gracias a “El código Da Vinci” su nombre entró a formar parte de la nómina de autores de best-sellers cuyas ventas están casi aseguradas, junto a Ken Follet, Stephen King, Dean R. Koontz o la española Matilde Asensi. A pesar de su limitadísima capacidad literaria, ha conseguido una legión de seguidores que le perdonan casi cualquier cosa. Su álter ego Robert Langdon, personaje plano y de nula profundidad, es el protagonista de “El código…” y de otra novela anterior, “Ángeles y demonios”, mucho más entretenida, pero igual de hueca. El director Ron Howard ha sido nuevamente el encargado de adaptarla al cine y, de nuevo, con el mismo resultado: una vulgar y tediosa película que sólo gustará a aquellos que hayan viajado a Roma y deseen recordar sus vacaciones en la Ciudad Eterna.

Zara's World

Una de las grandes exportaciones estadounidenses ha sido el megacentro comercial. Hace un par de décadas viajábamos a las capitales de provincia para pasar un día entero en una de estas grandes superficies. Aquello era como visitar un parque de atracciones cuando eres niño. Ahora ya no hace falta desplazarse tanto: cualquier ciudad de tamaño mediano cuenta, no ya con uno, sino con dos o más centros de este tipo. Gandia, por ejemplo, ya cuenta con tres parques comerciales: la Vital, Plaza Mayor y Myo. Pero da igual que estés en Lugo o en Gandia porque lo que encuentras en ellos es exactamente lo mismo: el imperio Zara (algún día Amancio Ortega será el dueño del mundo), McDonald's, Jack & Jones, Springfield, Bel-Ros... Todas venden lo mismo a los mismos precios (otra mentira que nos han contado los defensores del libre mercado).

Definitivamente, estamos asistiendo a la uniformización de nuestros pueblos y ciudades, a la homogeneización de todo un país (y, si me apuran, de todo un continente). Dentro de poco, lo exótico será tan extraordinario, tan inusual, que nos dará miedo.
Y habrá quien lo considere una amenaza.

La niña pez

El pasado jueves fui a ver la última película del genio de la animación japonesa, Hayao Miyazaki, ganador del Oscar por "El viaje de Chihiro".

Su protagonista es un niño que vive junto a su madre en lo alto de un acantilado. Un día recoge del mar un pececillo al que bautiza con el nombre de Ponyo. El animalillo es dueño de un poder que le permite convertirse en humano. Mejor dicho, en niña. Pero esta idea no entusiasma a su padre, guardián de la pureza del mar. Grosso modo, ése es el argumento de una cinta que resume buena parte del ideario de Miyazaki: ecologismo, respeto por los ancianos, el camino hacia la madurez de los niños, viejas leyendas... Son algunos de los rasgos que caracterizan su cine. "Ponyo en el acantilado" es una película infantil, muy infantil, pero entendámoslo en la mejor acepción del término (desde que empezó la vi con la boca abierta, como hacen los niños cuando se les sorprende).
Otro aspecto a destacar: la calidad de su dibujo. Ya no se hace animación tradicional y los fotogramas de "Ponyo..." son como cuadros de un museo.
Maravillosa la historia de esta niña pez.

Seguimos "posteando"

Aunque ya no estemos en antena, me gustaría continuar comentando y compartiendo con los internautas opiniones en torno a lo que nos rodea.
No sé la de blogs que hay en Internet en los que los parados vuelcan su día a día y no seré yo quien les copie la idea. Ayer fui a las oficinas del Servef (o Inem) en Gandia y aluciné con la cantidad de gente que había. Tras dos horas y media de espera, llegó mi turno. La funcionaria se sorprendió cuando leyó que era locutor: "no sabía que también os afectaba la crisis", me dijo. Como si viviéramos en otro mundo. Seguramente, Carles Francino o Jiménez Losantos o Carlos Herrera no la sufrirán, pero los que no jugamos en esa liga, ¡vaya si la padecemos! Le pregunté a la mujer si habían atendido a tantas personas años atrás: "nunca habíamos visto nada parecido", me confirmó. Próxima cita: el 6 de mayo.
El día pasa rápido entre papeles.
Hoy ha sido mucho peor: me imaginaba en mi jornada habitual, en la radio, con los periódicos en la mano, llamando a los colaboradores del programa, ultimando entrevistas, tomándome un café en el almuerzo con mi amiga Carmen en el Continental (el Conti, decíamos nosotros)... Y vuelta a la realidad: no tengo nada que hacer. Leeré los libros que tengo pendientes, iré a la playa a coger un poco de color (tengo una boda el sábado y no quiero parecer un cadáver), pasaré más tiempo en el gimnasio... Sólo tengo claro que mis vacaciones de agosto (que ya tengo pagadas) las pienso disfrutar. Y cuando regrese: ¡ya veremos lo que hacemos!
Puede parecer que soy un vago del copón, un parásito social. Qué puedo decir: también me lo he ganado.