martes, 29 de enero de 2008

De disfraces y hombres

De nuevo, los juzgados. Esto ya no tiene nombre. Atención a los datos que publica hoy la prensa: las sillas las tiene que traer el trabajador de casa (en este caso, no se da eso tan español de llevarse material de oficina para casa, que si un boli, que si unos cuantos folios; más que nada, porque no hay nada que llevarse), las ratas y las cucarachas campan a sus anchas (que esto en “Ratatouille” es muy gracioso y son monísimos todos los bichitos, pero en la vida real no tiene ni pizquita), durante las vacaciones el edificio estuvo tres semanas sin limpiarse (para qué lo vamos a limpiar si no hay nadie que lo ensucie), las piezas que se incautan se pudren y los pocos funcionarios que hay deben multiplicarse para sacar algo de trabajo adelante…

Parece de película tipo, “Esta casa es una ruina”. Sólo que esta película no tiene gracia ninguna y tampoco sale Tom Hanks. Y eso está pasando aquí, en Gandia. ¿Y saben lo que hacen o dicen los políticos locales, autonómicos o nacionales? Nada de nada. Unos hablan del turismo desde Madrid, a otros les preocupa que los serenos lleven dos meses sin cobrar… Y seguramente todos esos serán temas muy importantes, no lo pondremos en duda.

Pero cuando la administración de la justicia falla, cuando los mecanismos que nos da el Estado para que ésta funcione son escasos y andan más bien oxidados, ni hay justicia ni hay nada.
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¿Por qué nos disfrazamos? ¿Por qué a los hombres les encanta disfrazarse de mujer en Carnavales? ¿Vamos disfrazados en nuestra vida diaria? Mayca Castro, nuestra psicóloga de guardia, nos habla de ello esta semana: disfraces.rar


A Marietta de los Espíritus le encantan las entregas de premios y nos lo cuenta en una nueva carta:

Mi queridísimo Paco:

Creo que este fin de semana se entregan los Goya. Ya sabes, esos premios que aspiran a convertirse en los Oscar de España, pero sin dinero. Bueno, no quiero que te lleves una impresión errónea, pues ni los Goya ni el cine español son el motivo principal de la carta de esta semana, ¿verdad? Reconozco que me encanta seguir ese tipo de entregas de premios. Si me gustarán que hasta me veo enteritas las que organizan aquí los empresarios (sí, ésas protagonizadas por siglas: F.A.E.S., C.E.S., C.I.S., Z.A.S., en fin…). Aparte de verlas por cotillear quién va y quién no va y por criticar los modelitos de la concurrencia, te seré sincera: las veo -simple y llanamente- porque me encanta verlas.

A quien habría que darle un premio a la constancia es a Joan Francesc Peris por lo del agua. “¿Quién dijo miedo?”, debió pensar cuando las urnas decidieron que no ocupara un sillón de concejal. ¡Pero si sale ahora más en la tele que antes! Con el lío éste de la concesión del agua, a este hombre le han dado munición para una guerra quasi mundial. Y no te quiero contar con lo del “gandiano”. Que, por otra parte, no sé a qué ha venido tanto lío: ¿no somos la ciudad de todas las personas, de todas las culturas? ¿Acaso no vivimos con búlgaros, rumanos, marroquíes, rusos, etcétera? ¿Acaso no hemos incorporado a nuestro equipaje cultural los muchos idiomas de los nuevos ciudadanos? ¿Por qué no añadir uno más, aunque no exista, como el “gandiano”?

Por lo visto, según se dice en el famoso pliego de condiciones, los clientes podrán dirigirse a la empresa en castellano o en “gandiano”. Desde el gobierno municipal se le echa la culpa a la informática, que es la que siempre termina pagando el pato. Y no seré yo quien lo ponga en duda. Pero lo que me llama la atención es que alguien tuviera la santa paciencia de mirar todas y cada una de las palabras del dichoso pliego de condiciones hasta dar con la errata “gandiana”. Si yo tuviera que hacer eso me daba un patatús, te lo digo de verdad, ¿verdad?

¿Y qué me dices de los nitratos? ¿Qué va a pasar con los nitratos? ¿Cuántos nitratos son buenos y cuántos nitratos son malos? ¿Para qué sirve un nitrato? ¿Qué carajo es un nitrato, en definitiva? ¿Moriremos todos por culpa de los nitratos?

Ha llegado un momento en que me han hecho aborrecer el agua. No te digo más que llevo una semana bebiendo fantanaranja, y perdón por la publicidad.

Y tanto gas en un cuerpo tan pequeño y delicado como el mío, no puede ser nada bueno.

Afectuosamente,
Marietta de los Espíritus


Aquí te puedes descargar el audio: marietta_30_ene.rar



Juanfer Monzó, alcalde de Potries, nos invita a visitar el Porrat de su ciudad, que este año está dedicado al fuego. Además, oferecen dos buenos conciertos que tendrán una finalidad benéfica: el del grupo de la Safor La Raíz y el de Jaime Urrutia: porrat_potries.rar

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